Criticamos que se nos haya hurtado a las OPA la posibilidad de hacer aportaciones y mejoras durante el proceso de elaboración de esta ayuda.
Hemos tenido que enterarnos de los detalles de la ayuda a la vendimia en verde en la rueda de prensa de la consejera, ya que las Organizaciones Profesionales Agrarias no hemos podido participar en la redacción final de esta norma (al igual que sucedió el año pasado, con las ayudas a la destilación), no dándonos un plazo a las OPA para presentar alegaciones o propuestas de mejora. De esta manera, tras analizar los pormenores de la ayuda publicada, vemos que resultamos perjudicados los viticultores profesionales, que somos quienes más estamos sufriendo la actual situación de precios por debajo de costes, incluso en algunos casos sin bodega a la que llevar esta campaña sus uvas.
Desde que en 2020 se establecieran por primera vez en La Rioja ayudas para la vendimia en verde, las hemos impulsado y defendido como el mejor elemento para evitar la acumulación de excedentes y garantizar un precio mínimo para compensar el trabajo de los viticultores. Es por ello que manifestamos nuestra indignación por no haber sido tenidos en cuenta durante el proceso de elaboración de la normativa que las pone en marcha. De haberlo hecho, hubiéramos alegado contra algunas de las puntuaciones que se otorgan a los solicitantes, ya que el sistema elegido perjudica a los viticultores profesionales que solicitemos más hectáreas.
Esto sucede porque se conceden 5 puntos a las solicitudes de menos de 4,5 hectáreas, 1 punto entre 4,5 y 6, mientas que se quedan sin puntos quienes pidan entre 6 y 10 hectáreas (límite máximo por solicitante, tramo en el que por lógica deberíamos figurar los viticultores profesionales). En cambio, a los jóvenes agricultores y a las Titularidades Compartidas solo se nos dan 3 puntos, 4 a los agricultores con título de Explotación Prioritaria.
El sistema de puntuación elegido se justifica “para que se reparta más la ayuda y llegue a todos los solicitantes”, pero esto puede llevar a que muchos viticultores profesionales reduzcan sus solicitudes para obtener más puntos y garantizarse el acceso a la subvención. Queremos una ayuda a la vendimia en verde sin cortapisas, que cada viticultor pueda solicitar hasta el máximo de 10 hectáreas, si lo necesita, como el año pasado.
Además, al incentivarse que se presenten solicitudes para pocas hectáreas, es posible que estas acaparen todos los fondos procedentes de la Intervención Sectorial del Vino del Ministerio, de manera que, para completar el dinero con fondos 100% de La Rioja, a los agricultores profesionales se nos concedería una ayuda “de minimis”, régimen más estricto, topado, y que compromete la percepción de estos apoyos en las próximas campañas.
